En la oscuridad o en condiciones de iluminación difíciles, los faros sirven para iluminar la zona circundante. Todos los equipos de iluminación del exterior de un vehículo requieren una aprobación técnica. Los faros más utilizados son las luces de cruce, también llamados luces cortas. Las luces de carretera aumentan la zona iluminada en la oscuridad y donde la densidad de tráfico es baja. Además de estas, las únicas luces adicionales homologadas son las antiniebla, que pueden encenderse solo en caso de mal tiempo, por ejemplo, en caso de niebla, lluvia o nieve. Por otro lado, las luces antiniebla traseras solo pueden funcionar cuando la visibilidad es inferior a 50 m. Con las luces antiniebla traseras encendidas, la velocidad máxima está limitada por ley a 50 km/h. Técnicamente, las luces de marcha atrás de los turismos son solo luces traseras. Los faros siempre están dispuestos en pares en el vehículo. Los intermitentes delanteros, traseros y laterales, así como las luces laterales (de estacionamiento) y la iluminación de la matrícula trasera completan el equipo de iluminación de un vehículo.
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